Escuelas del Cariño se reunió con encargados de Educación de Adultos del MINEDUC

La cita fue parte de los esfuerzos que Escuelas del Cariño realiza ante el Gobierno para que la educación de adultos sea incorporada a la Ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP), que por ahora solo incluye alumnos regulares desde Pre Kinder hasta 4° Medio. En nuestro país hay más de cinco millones de personas que no han completado sus estudios, situación que hace urgente otorgarles beneficios e incentivos para que se escolaricen.

Por parte del Ministerio de Educación (MINEDUC) nos recibió María Eugenia Letelier, jefa Área de Trayectorias Educativas y Aprendizaje a lo Largo de la Vida, y Nicolás de Rosas, profesional de Educación de Adultos. A ellos les planteamos que es la oportunidad para introducir elementos de mejora en la educación en general, y que dado que hay pocos recursos municipales para educar a los adultos, estos deben ser incorporados a la Ley mediante una indicación presidencial, ya que implica gasto público. 

 La Ley SEP está en segundo trámite legislativo, en la comisión del Senado, y la última vez que dicha instancia abordó el tema fue en enero de 2021. Letelier explicó que el MINEDUC debe elaborar un informe al respecto, luego visado por el ministerio de Hacienda, y solo entonces el ministro de Educación puede solicitar la indicación al Ejecutivo. Las autoridades anunciaron su intención de construir conversaciones simultáneas que posibiliten una articulación técnico-política, ya que los adultos que requieren ser escuchados no tienen capacidad de presión social. Letelier puntualizó que “falta una mesa intersectorial para hacer oír su voz, la de pobladores, senadores, diputados, municipios y privados”.

Además, Escuelas del Cariño expuso su plan piloto de regularización de estudios para el campamento Felipe Camiroaga de Valparaíso. En principio, sería para 300 personas en 2023, incluyendo a los dirigentes de los 15 comités existentes. La modalidad sería flexible semipresencial (dos días de la semana con clases presenciales, y con las sedes de los comités abiertas de lunes a viernes con computador y monitor de acompañamiento disponible). Según un estudio efectuado por Escuelas del Cariño, de los más de cinco mil habitantes del campamento (hecho que lo constituye como el más grande del país), un 85% no ha terminado sus estudios (4° medio), y un 30% no ha concluido la Educación Básica.

Para entregar educación a los pobladores, la escuela Oscar Marín Socías de Viña del Mar ha sido ofrecida a Escuelas del Cariño en comodato por ocho años. Sin embargo, el inconveniente con ese establecimiento es que queda alejado de la toma, y por lo tanto las personas no irán a clases. Además hay problemas de seguridad propios de la realidad socio-económica que viven los habitantes del campamento Felipe Camiroaga. De hecho, el acceso se cierra a partir de cierta hora y el transporte Uber no efectúa servicios.

Hacer clases en modalidad flexible para adultos en las sedes de los comités fortalecería la cohesión social, generando vínculos entre los pobladores, y ello sería un factor protector respecto de la seguridad y el consumo de alcohol y otras drogas. Esta es la razón por la que se hace necesario un acompañamiento educacional de acuerdo a las necesidades de las personas. La educación de adultos tiene que ser flexible, ya que la gente quiere educarse en una escuela, pero no puede asistir a clases todos los días debido a su contexto de vulnerabilidad. Es necesario, entonces, generar políticas públicas de mejora de la educación pública para este segmento de edad. María Eugenia Letelier puntualizó que “la modalidad flexible es perfectamente posible en el campamento, necesitamos más Educación de Adultos y desde los municipios se debe visibilizar esta necesidad”. Nicolás de Rosas coincidió con esta apreciación, acotando “que lo principal es visibilizar la Educación de Adultos y hay que abordarla desde las personas, con características, necesidades y expectativas especiales, y estas han de ser abordadas políticamente”.